28.10.06



Azul como el cielo que duerme,
azul como el mar que no se ve.
No diviso el horizonte.
El azul empieza en mis pies
y termina en mi cabeza.
En el cielo hay olas,
en el mar hay estrellas,
ambas cosas se unen
al entrar en mi corazón.
Una débil línea, blanca,
pone fin o da comienzo,
no se,
a un enorme mar de ensueño.
Una línea que viene y se va,
que la miras y ya no está.
La luna cortada observa
des de su balcón,
como mis ojos,
que yo tengo por ella.
El ruido del nuevo mundo,
en el que yo me desperté
un día sin importancia,
me hace abrir los ojos,
para ver la realidad.

No comments: